Katamari. No sé cómo salió semejante idea que hoy en día es una saga consagrada con unos 14 juegos a sus espaldas. Conocí esta saga con su primera entrega que salió para la querida PlayStation 2 y en un perfecto japonés. No entendía nada, pero no era necesario porque el juego entretenía y enganchaba de tal manera que podía pasar horas jugando.
No estoy hablando de una saga que tiene una historia elaborada o unos gráficos excelentes. Realmente no los necesita, su estética colorida y la sencillez de su historia hace que sea un juego ameno y entretenido.
He de confesar que no he jugado a todos los juegos de la saga pero con tal sólo leer u oír la palabra Katamari puedo decir que es algo que sé que me va a gustar.
Y ya. Ni hay armas secundarias ni movimientos especiales. Sólo controlamos una bola que llevamos de un lado para otro, cosa que no será fácil al principio por culpa de la cámara (entre otros).
En mi opinión, veo la saga de Katamari como esos juegos que te apetece jugar cuando no tienes mucho tiempo pero tienes ganas o buscas algo que no te de dolor de cabeza por pensar en todos los detalles que se cuenta en la historia. No es necesario jugar a cada una de las entregas que componen la saga, se puede empezar por el cuarto (por poner un ejemplo). Pienso que a Katamari hay que darle al menos una oportunidad y juzgarlo y no guiarte por unas pocas palabras escritas en una entrada. No se sabe lo divertido que puede llegar a ser hasta que lo pruebas.
1 Comentarios
Pues, visto esto, creo que voy a probar la versión de PSP. ¿Te puedes creer que nunca he jugado a uno? :S Pero si tu me lo recomiendas, le doy un tiento.
ResponderEliminar